Nuestra asociación se congratula enormemente de haber podido aportar algo positivo para el medio ambiente una vez más. En este caso hemos conseguido un paso más en el “Proyecto de Conservación de la Taraxacum gaditanum” que comenzamos a organizar el año pasado.

            Todo empezó cuando nos planteamos actuar en la protección y conservación de esta planta. Nos pusimos en contacto con el zoo-botánico de Jerez, más concretamente con Íñigo, a quien le planteamos nuestra idea. A su vez nos pusieron en contacto con el técnico de conservación de la flora de la Junta de Andalucía con competencias en nuestra zona, concretamente con Juan Luis.

            Después, el 14 de abril, todos los esfuerzos se materializaron en el rescate o extracción,  de plantas de una población de una parcela donde estaba prevista su próxima construcción. También fue una actividad participativa, donde todo el que quiso pudo colaborar.

            El siguiente paso era dejar pasar el verano; ya que en otoño es cuando florecen, para que en el zoo de Jerez y en el botánico de San Fernando pudieran recogen semillas y seguir manteniendo la genética de la población en siguientes generaciones controladas por los técnicos.

            Una vez que las plantas se mantuvieron en condiciones adecuadas, y después de recoger sus semillas, se deben replantar en lugares próximos a su área de crecimiento natural; así que decidimos que el Pinar de la Villa podría ser un buen lugar. Los técnicos escogieron el lugar y nosotros organizamos la replantación participativa. Por supuesto, también se contó en todo momento con el grupo ecologista CANS, ejemplo de defensa para la naturaleza chipionera, y el Ayuntamiento de Chipiona, organismo competente en las masas forestales del pinar de la Villa.

            Se replantaron aproximadamente unas 200 plantas distribuidas en tres pequeñas parcelas con sustrato y condiciones adecuadas. Donde numerosos amigos de Chipiona, de Eriphia, del grupo CANS y del club de amigos del zoo participaron echando un buen ratito.

            Ahora toca hacer un seguimiento de las diferentes poblaciones de Taraxacum gaditanum , tanto la creada en el pinar como de otras que hay en Chipiona. Así como esperar que todo vaya bien y se logre mantenerlas.

            Nos sentimos satisfechos todos por poder aportar un granito de arena en la conservación del medio ambiente y sobretodo por conseguir aunar esfuerzos de diferentes organizaciones y personas que han podido reunirse y participar por mejorar un bien común, nuestro entorno.

            Muchas gracias a todos los que colaboraron y participaron, especialmente a los niños que son los que en el futuro tienen que comprender la importancia de estas actividades y continuarlas, y a Juan Luis Rendón e Iñigo García Sánchez por permitirnos hacer esta actividad y por facilitar las cosas a todos.

más referencias: http://www.eriphia.org/detallecons.aspx?id=3